4 de enero de 2011

Berlín, botas que se desintegran y brazos que salen de su sitio...

Berlín, la capital de Alemania... qué cosas tiene Berlín... maaaadre mía... unos edificios.... más cuadraos que un dado... unas calles... más congeladas que las croquetas del mercadona.... en fín, vayamos por partes.

La primera noche no fue nada mal, creíamos que el hotel estaba alejado de las zonas interesantes...y era cierto, estaba lejos de las zonas interesantes para nuestro bolsillo... porque estar a 50 metros de Chanel, Cartier, etc... como para ponerse a comprar souvenirs!!! Las calles eran preciosas, iluminadas, llenas de nieve, de ambiente navideño en general... y bueno, con un paseo nos bastó para quitar el nerviosismo de llegar a una nueva gran ciudad como turistas.

La mañana siguiente fue interesante, probamos el metro: más pequeño que el de NYC, más educado y tranquilo, y sobre todo, silenciosísisisimo!!!!
Cuando nos reunimos con el resto del grupo (nosotros llegamos un día más tarde por motivos laborales...) resultó que nos vimos obligados a ir de tiendas, a buscar unas botas para la nieve, ya que a una compañera se le iba desintegrando la suela (literalmente). Podría habernos seguido cualquier malhechor simplemente siguiendo los trozos de bota...
En fin, toooda la mañana viendo lo caras que son las botas en Berlín, y los pocos 39 que tienen!!!! (me recuerda a mí el año pasado buscando mis Timberland como ya conté en una entrada!!!).

La tarde (relativamente hablando, por horario era la tarde, aunque por luz era la noche...) la acabamos paseando por Alexanderplatz y volviendo al hotel para descansar y afrontar la noche, que pensábamos sería tranquila, iríamos a pasear viendo la "East Gallery", 1,3km de muro decorado con murales, no sabíamos que la cosa acabaría en un hospital, con ambulancias y un estadio de hockey hielo de por medio...

En próximas entradas: de cómo alguien puede pasar de la felicidad infantil al dolor infernal.


En fin, unas fotos del día:

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