8 de julio de 2010

Un regreso interesante

Érase una vez uno que se fue en bici, de esas de montaña, a hacer una ruta por el monte con otro amigo, con otra bici.
Iban los dos tan alegremente circulando montaña arriba, y en tan buena forma que hasta un grupo de corredores con una media de unos 45 años les adelantó, cuando decidieron improvisar y salirse de la ruta marcada a priori.

En esta ruta nueva, se encontraron con una subida difícil, pero bonita, de unos dos metros de altura. Uno de ellos (que vengo a ser yo, pa' ser claros) dijo: "pues yo creo que la puedo subir", y se preparó.

Tras tomar unos pocos metros de carrerilla, cambiar al piñón pequeño y tomar fuerzas, empezó a pedalear como un poseso, hasta que llegó a la base de la subida. En ese justo momento, y viendo que era posible la gesta, se le metió la rueda en una grieta y se metió un pequeño guarrazo frontal que, al ir protegido, no pasó a mayores. El problema surgió al querer intentarlo de nuevo, volviendo a tomar carrerilla. En ese justo momento, se dio cuenta de que la rueda se había convertido en algo más parecido a un libro, por doblada, que hacía imposible seguir la ruta.

Al menos, se pudo volver (sin el freno delantero, eso sí) encima de la bici, y se ahorró un buen pateo de unos 8 km. 25 euros me costará la llanta nueva. Pero que quede claro, y te lo digo a tí, rampa de pacotilla, que esto no quedará así, ¡te voy a subir!

3 comentarios:

  1. jajajajjaja ahí todo cabezota, di que sí... que no te gane una simple rampa.. :P

    ResponderEliminar
  2. Válgame!!!!
    Por Dios Aaron!!!!
    Que mi ultimo conocido que se empeño en eso esta con la clavicula rota!!!
    Las bicis las carga el Diablo!!!

    ResponderEliminar
  3. Hola MoeX y Pérfida !!!

    Es una rampa pequeña y no se puede coger mucha carrerilla, así que tranquilas... creo que no se puede ir demasiado rápido!!

    ResponderEliminar